El gobernador Gustavo Valdés respaldó este viernes el sistema de partidos políticos, al que definió como “un enganche entre el pueblo y el poder”, y cuestionó a exsocios de la alianza oficialista al asegurar que “no estamos más para repartirnos el Estado como botín de guerra”.
En un acto en el Centro de Convenciones, Valdés dijo que, en los siete años y medio que lleva en el Gobierno, “nunca” tuvo “la tentación” de perpetuarse en el poder, a través de una reforma constitucional que estableciera la reelección indefinida. “El poder tiene que ser temporal, tenemos que tener periodicidad”, aseguró en el lanzamiento de Vamos Corrientes, una alianza de 28 partidos conformada para las elecciones a gobernador de este año.

Dijo que el acto de hoy “es el primer paso” dela construcción de Vamos Corrientes, y convocó a sumarse a ese espacio para dejar atrás “25 o 30 años de trapisondas”.
“Con presidentes y dirigentes de 28 partidos políticos, además de legisladores nacionales y provinciales, así como más de 60 intendentes, empezamos la construcción de este gran espacio social y político”, posteó el gobernador y presidente de la UCR provincial en la red social X.

“Creemos en los partidos políticos porque fortalecen la democracia: tenemos que continuar convocando a todos aquellos que quieran participar y aportar a este modelo plural, donde el diálogo, no la especulación, es lo que nos une”, agregó.
Sin antiguos socios como el Partido Autonomista y Encuentro Liberal (ELI), Valdés exhibió nuevos aliados en Vamos Corrientes, como el peronista José Tata Sanánez, exintendente de Santa Lucía, quien estuvo en el escenario.
El líder radical rechazó la violencia política y condenó el ataque a la sede del Partido Libertario en Corrientes, agrupación con la que se solidarizó por el hecho.

Además de Valdés, hablaron en el acto el vicegobernador Pedro Braillard Poccard, del Partido Popular; el diputado provincial Emilio Hardoy, del Partido Liberal (PL); Lorena Lazaroff, de PRO, y el intendente de la Capital, Eduardo Tassano (UCR). En la primera fila, además de Sanánez, estuvo sentado Hugo Calvano, de la Coalición Cívica-ARI, y Ariel Báez, de Ciudadanos Comprometidos (CICO), entre otros dirigentes.

Pidió “abrir las cabezas” y afirmó que el Estado “no debe generar empleo público”, ya que “el dirigente político es bueno” si instala “una industria que genere empleo en su ciudad y que no sea ñoqui de la Legislatura”.
CGP
