La empresa de colectivos que maneja el 80 % de las líneas urbanas de la ciudad de Corrientes, ERSA, anunció en la noche de este jueves que resolvió dejar de operar en esta capital, a horas de que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) levantó un paro de choferes en reclamo del pago de salarios.
ERSA, fundada en 1963, asegura que le “resulta materialmente imposible continuar con la prestación del servicio”, luego de 60 años.
“Esto significará el cese de casi 1000 puestos de trabajo de los 5500 que genera con sus actividades en todo el país, para lo cual formalizará las presentaciones del caso ante las autoridades competentes”, señala el comunicado firmado por Juan Carlos Romero, presidente del grupo.
La UTA había iniciado un paro este jueves en la capital en reclamo del cumplimiento del aumento acordado en noviembre, que, según el sindicato, “no se hizo efectivo”.
“Los trabajadores encontraron en sus cajas de ahorro un monto que no se corresponde al salario con el aumento. No sabemos qué es lo que depositaron los empresarios”, detalló el secretario general de UTA, José Luis Sabao.
Sin embargo, las empresas abonaron lo adeudado y la medida de fuerza se levantó pasado el mediodía.
Restablecido el servicio en la ciudad, ERSA difundió el comunicado con la decisión de dejar de operar en la capital correntina, con el argumento de que el “incumplimiento de los contratos de concesión del servicio público”.
“Las tarifas fijadas desde el inicio de la concesión no han respondido a las claras normas del contrato porque no se han establecido en función de los costos reales de la operación. Ello generó permanentes déficits que dieron lugar a numerosas presentaciones al poder concedente”, dice el texto firmado por Juan Carlos Romero.
Agrega que esa “situación no fue atendida de modo suficiente y oportuno por el Estado provincial, a pesar de los convenios que se suscribieran con el Ministerio de Transporte de la Nación, en el marco del Fondo Compensador del Transporte Urbano y Suburbano del Interior del país”.
ERSA advierte de que “estas condiciones serán más desfavorables en 2024. Ello surge de la lectura de la Ley de Presupuesto de la Provincia de Corrientes, que establece que se destinarán al transporte público unos $ 2000 millones de pesos. Esto significa solo el 0,18 % del presupuesto total provincial, porcentaje que en los últimos años se redujo considerablemente frente a los ingresos corrientes de la Provincia”.
“Es evidente que el servicio público de transporte en Corrientes dejó de ser una prioridad. Los beneficios que conllevan tener un transporte de pasajeros digno, regular, económico y eficiente no se encuentran dentro de las políticas públicas actuales”, afirma el grupo empresario.
“Desde hace tiempo, no está garantizada la sustentabilidad de un sistema que requiere previsibilidad e ingresos suficientes para mantener la regularidad y continuidad de los servicios”, agrega.
La decisión de ERSA se da en el contexto de un pedido de la Cámara Empresaria del Transporte Urbano de Corrientes (Cetuc) de un boleto a $ 600, lo que significaría el triple del valor actual, según dijo Gustavo Larrea, vocero de la entidad, en declaraciones a Radio Dos.
CGP y agencia Télam