La Cámara de Diputados de la Nación aprobó este martes y giró al Senado el proyecto de ley de reforma del impuesto a las ganancias por el que se elimina la cuarta categoría, que grava los sueldos de los empleados, y creó un tributo sobre los altos ingresos que se pagará cuando se cobren haberes superiores a los 15 salarios mínimos (SMVM) mensuales.
Pasadas las 21.30, la iniciativa fue sancionada por 135 votos, que fueron aportados por los bloques Frente de Todos (FDT), la izquierda, los libertarios, federales, Provincias Unidas y los dos gobernadores electos de Santa Cruz, Claudio Vidal, y de Neuquén, Rolando Figueroa, socios de Juntos por el Cambio (JxC).
La bancada de JxC reunió 100 votos negativos y tuvo 17 ausentes, entre ellos Ricardo López Murphy, María Eugenia Vidal y los gobernadores electos Claudio Poggi (San Luis) y Marcelo Orrego (San Juan). Los otros 3 votos en contra del total de 103 fueron de los schiarettistas Carlos Gutiérrez, Ignacio García Aresca y Florencio Randazzo, candidato a vicepresidente en la fórmula con el gobernador cordobés.
El ministro de Economía, Sergio Massa, estuvo en el Congreso y en el último tramo en el recinto de sesiones, junto a los sindicalistas Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña, escuchando los últimos discursos antes de la votación de esa iniciativa promovida por el oficialismo.
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— Sergio Massa (@SergioMassa) September 20, 2023
La bancada del FDT pudo sancionar el proyecto impulsado por el ministro Massa luego de construir una mayoría con legisladores de los bloques provinciales, federales, la izquierda y los libertarios, que le permitió al oficialismo alcanzar el quorum reglamentario y luego aprobar la ley.
La sanción del proyecto fue respaldada por una masiva marcha de la CGT, de las dos CTA y otros sectores sindicales en las calles frente al Congreso nacional.
A lo largo del debate se cruzaron acusaciones el oficialismo y JxC, y entre esa coalición y los libertarios, y en el último tramo hubo fuertes gritos ante el duro discurso contra Massa y los sindicalistas del diputado radical Mario Negri.

En esos momentos, el presidente del bloque de diputados del FDT, Germán Martínez, afirmó que “hoy tenemos la enorme oportunidad de que 800 000 de los trabajadores alcanzados por el impuesto a las ganancias dejen de estarlo y esto no es casualidad, es resultado de una decisión política”.
Por su parte, Negri afirmó “que casi todo el arco político, desde la izquierda a la ultraderecha, apoyen el proyecto de un ministro candidato que duplicó la inflación en un año es llamativo. Juntos por el Cambio no va a especular electoralmente cuando hay riesgos serios de hiperinflación”.
El proyecto que ahora deberá ser analizado por el Senado elimina desde 2024 la cuarta categoría del impuesto a las ganancias y crea un tributo cedular que deberán pagar aquellos que cobran salarios superiores a 15 salarios mínimos, vitales y móviles.
Quienes perciban altos ingresos pagarán una alícuota progresiva sobre el excedente que va de 27 % a 35 %, que se actualizará con el valor del SMVM dos veces por año.
De esta forma, solo pagarán el impuesto a las ganancias 88 000 contribuyentes, lo que representa menos del 1 % del total de las remuneraciones, jubilaciones y pensiones.
Al abrir el debate, el presidente de la comisión de Presupuesto, Carlos Heller, destacó los alcances del proyecto y recordó que “la eliminación del tributo fue eje de la campaña de gobiernos anteriores”, en relación a Cambiemos en 2015, y que “finalmente, en vez de cumplir con eso aumentaron la cantidad de trabajadores alcanzados”
Desde la oposición, el vicepresidente de la Comisión de Presupuesto y uno de los asesores de Patricia Bullrich, Luciano Laspina, aseguró que “es una ley que beneficia a 800 000 personas y perjudica a 47 millones de argentinos, poniendo al país al borde de la hiperinflación”.

La oposición argumentó su rechazo en que, según la Oficina de Presupuesto del Congreso, el impacto será de 0,83 % del PBI y que, al no ser compensado con una reducción del gasto, terminará siendo financiado con más emisión. Por lo tanto, advirtieron que la iniciativa alentará la inflación, que “terminará siendo pagada por los sectores más pobres de la población”.
En cambio, el diputado y candidato a presidente por la Libertad Avanza, Javier Milei, respaldó el proyecto porque “es más libertad y es devolverle los derechos a la ciudadanía”.
Desde la izquierda, la diputada nacional del Frente de Izquierda Myriam Bregman sostuvo que “el salario no es ganancia”, para justificar su respaldo al proyecto del Poder Ejecutivo de modificación del impuesto.

La legisladora, al mismo tiempo, cuestionó a los bloques opositores que se oponen a la iniciativa al sostener que “cuando es el bolsillo de los trabajadores les agarran las ganas de cuidar las arcas del Estado”.
La legisladora de Identidad Bonaerense, Graciela Camaño dijo que “lo que estamos discutiendo es un cambio de paradigma y no es menor. Yo vengo a apoyar este proyecto porque los salarios gozan de plena protección constitucional y legal. El salario nunca debió estar en ninguna cuarta categoría”.
Con información de la agencia Télam