La jueza de Garantías Josefina González Cabañas dispuso este jueves la prisión preventiva del exsubjefe de la División Antiarrebatos de la Policía de Corrientes Guillermo Oliva, acusado de abusar de su hijastra, y su traslado a la Unidad Penal N.º 6.
La defensa de Oliva, que fue detenido el martes por la Policía Federal en su domicilio del barrio Laguna Seca, se opuso al traslado, por lo que por ahora el acusado seguirá recluido en dependencias de la Policía Federal, se informó.
La fiscal Sonia Meza pidió hoy, en la audiencia de coerción, que Oliva quede con prisión preventiva, a lo que la jueza González Cabañas accedió y ordenó el traslado del subcomisario, pero la decisión fue “impugnada por la defensora oficial”, Sánchez Peralta, comentó la magistrada en declaraciones a Radio Dos.
La jueza anticipó un pedido para que la víctima, de 14 años, declare en cámara Gesell.
Oliva, acusado de abusar sexualmente desde 2016 de la hija de su pareja, participó de la audiencia de coerción pero se abstuvo de declarar, confirmó González Cabañas.
La fiscal Meza imputó al efectivo de “abuso sexual con acceso carnal continuado agravado por el vínculo”.
El acusado llegó, pasadas las 8, a la Oficina Judicial ubicada en Jujuy 848, bajo la custodia de la Policía de Corrientes.
“Dispuse no solo la prisión preventiva, sino además el traslado del imputado desde la dependencia de la Policía Federal a una unidad del Servicio Penitenciario, que en este caso es la UP N.º 6. Esto fue impugnado en el mismo momento por la defensora oficial, Sánchez Peralta, por lo tanto, entre hoy y mañana será la audiencia de revisión por parte del juez que corresponde”, explicó a LT7 Radio Corrientes la jueza González Cabañas.
“La defensora argumentó la impugnación a que se lo traslade a la UP N.º 6 con que el hombre es policía. Seguramente se explayará sobre su objeción en la audiencia de revisión”, agregó.
El caso se destapó este lunes, cuando dos mujeres cercanas a la víctima se acercaron a Fiscalía para denunciar el hecho, del que se habían enterado la semana pasada. Tras la denuncia, la fiscal ordenó peritajes, cuyos resultados confirmaron que la niña había sufrido abusos.
“Todo comenzó el jueves pasado. Nos enteramos por medio de una carta que la nena le escribió a su amiguito. El nene se asustó lo que leyó, le sacó una foto a la carta y le mostró a la mamá. Ella se preocupó buscó ayuda y se contactó con la tía del corazón de la chica y le mandó las capturas de la carta”, contó una amiga de la denunciante, en declaraciones a LT7.
“Cuando la tía vio la carta, me llamó, porque se sentía muy sola y quería ayuda. Al principio nos dio miedo la situación, porque el tipo tiene un poder, nadie quiere ir contra la policía. Pero nos plantamos. Me asesoré bien sobre lo que teníamos que hacer y decidimos ir directamente a la Fiscalía”, dijo.
Contó que la niña “habló el viernes a la noche, cuando fue a cenar y dormir a la casa de la tía”. El lunes se radicó la denuncia, con “las pruebas” que habían reunido: “la carta, mensajes de texto y una grabación de la nena hablando con su primita, en la que cuenta cosas”, dijo la amiga de la denunciante.
CGP
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