Día 44 | Foto: un hombre pasa junto a autos quemados en una estación de tren, en Kramatorsk, el 8 de abril de 2022. Stringer/Reuters. Esta publicación contiene imágenes sensibles.
Ucrania cifró en al menos 50 los muertos este viernes en un ataque con cohetes en una estación de tren repleta de civiles que huían de la amenaza de una gran ofensiva rusa en el este del país.
El presidente Volodímir Zelenski calificó el ataque a la estación de Kramatorsk, en la región oriental de Donetsk, como un ataque deliberado contra civiles. El alcalde de la ciudad estimó que unas 4000 personas estaban reunidas allí en ese momento.
El gobernador regional, Pavlo Kyrylenko, dijo que la estación fue alcanzada por un misil balístico de corto alcance Tochka U que contenía municiones en racimo, que explotan en el aire y lanzan pequeñas bombas letales sobre un área más amplia. Muchos de los heridos estaban en estado grave, informó.
“Querían sembrar el pánico y el miedo, querían llevarse a la mayor cantidad de civiles posible”, dijo. Kyrylenko publicó una fotografía en línea que muestra varios cuerpos en el suelo junto a montones de maletas y otros equipajes. Reuters no pudo verificar de inmediato la foto.
El Ministerio de Defensa ruso, citado por la agencia de noticias RIA, aseguró que los misiles que supuestamente impactaron en la estación fueron utilizados solo por el ejército de Ucrania y que las fuerzas armadas de Rusia no tenían objetivos asignados en Kramatorsk este viernes.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, dijo que no había tropas ucranianas en la estación. “Las fuerzas rusas (dispararon) contra una estación de tren común, contra gente común, no había soldados allí”, dijo al parlamento de Finlandia en un discurso en video.
Según funcionarios ucranianos, Rusia está reagrupando fuerzas después de retirarse de las afueras de la capital, Kiev, para un nuevo intento de obtener el control total de las regiones orientales de Donetsk y Lugansk, en parte controladas por separatistas respaldados por Moscú desde 2014.
El estado mayor militar de Ucrania dijo este viernes que las fuerzas rusas se concentraron en capturar el asediado puerto de Mariúpol, en el sureste, luchar cerca de la ciudad oriental de Izyum y los avances de las fuerzas ucranianas cerca de Donetsk.
El jefe de política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, condenó el “ataque indiscriminado” en Kramatorsk. “Este es otro intento más de cerrar las rutas de escape para quienes huyen de esta guerra y causa injustificadas”, dijo en Twitter.
Si bien continuaron los esfuerzos para evacuar a los civiles del este y sur de Ucrania en riesgo de un ataque ruso, los residentes de las áreas al norte de Kiev recuperadas de las fuerzas rusas todavía estaban aceptando el horror de una ocupación de un mes.
Después de que Occidente condenara ampliamente las muertes de civiles en la ciudad de Bucha como crímenes de guerra, Zelenskiy dijo que la situación en Borodianka, otra ciudad al noroeste de Kiev, era “significativamente más terrible”.
No ofreció más detalles ni pruebas de que Rusia fuera responsable de las muertes de civiles en la ciudad.
Equipos de rescate buscaban a sobrevivientes entre los escombros de un bloque de departamentos calcinado con la sección central arrasada hasta los cimientos.
“Mi madre, mi hermano, la esposa de mi hermano, su madre y su suegro, todavía están allí, así como otras personas que estaban en el sótano”, dijo a Reuters el residente Vadym Zagrebelnyi.
Rusia negó haber atacado a civiles y dice que las imágenes de los cuerpos en Bucha fueron escenificadas para justificar más sanciones y descarrilar las negociaciones de paz.
En Yahidne, un pueblo al norte de la capital, los residentes relataron cómo los ocupantes rusos atraparon durante semanas a más de 300 personas en el sótano de una escuela, con los nombres de los que no sobrevivieron a las duras condiciones o fueron asesinados por soldados garabateados en la pared.
La fiscal general de Ucrania, Irina Venediktova, dijo que en la región de Kiev, que incluye a Borodianka, Bucha y otras ciudades y pueblos como Irpin, las autoridades encontraron 650 cuerpos, 40 de ellos niños.
Los fiscales de Ucrania informaron que 169 niños murieron y 306 resultaron heridos en el país desde el comienzo de la invasión.
El alcalde de Bucha dijo que decenas fueron víctimas de ejecuciones extrajudiciales llevadas a cabo por las tropas rusas.
Con información de la agencia Reuters