Productores ganaderos le presentaron este martes al gobernador Gustavo Valdés un diagnóstico del impacto de la sequía y los incendios en el sector, que atraviesa una “situación compleja”, según evaluó el presidente de la Asociación de Sociedades Rurales, Pablo Sánchez.
“Nos reunimos para ver cómo podemos moderar los efectos”, dijo Sánchez sobre la reunión de la Mesa Ganadera con Valdés en el Salón Amarillo de la Casa de Gobierno, donde representantes del sector le plantearon propuestas al Gobierno.
Sánchez dijo que lo más urgente “es generar las condiciones financieras para que el productor pueda comprar alimento y no tenga que desprenderse de sus animales”, y comentó que hay 10 000 kilómetros de alambrados dañados por el fuego.
Según estimaciones, las pérdidas en el sector alcanzaron los 30 000 millones de pesos.
En el encuentro se expuso un plan de trabajo elaborado por el equipo técnico del Ministerio de Producción y se abordaron dos ejes: uno productivo y otro ambiental.
“Vamos a comenzar a ver cuáles son las demandas que requieren puntualmente”, dijo el gobernador, que resaltó la decisión de la Provincia de eximir del pago de impuestos al sector ganadero y ratificó que las asistencias económicas se extenderán hasta fin de año.
Resaltó que se obtuvieron “cerca de 5000 millones de pesos del Banco Nación” y se le planteó al presidente Alberto Fernández sobre la necesidad de que los productores locales sean eximidos también del pago de impuestos nacionales.
Valdés adelantó que los legisladores nacionales por Corrientes impulsan un proyecto que propone “liberar a Corrientes de pagar impuestos”, que será tratado en el Congreso en los primeros días de abril.
Se estima que los efectos de esta sequía se sentirán a lo largo de al menos dos años.
CGP