Día 20 | Foto: En Sviatoshyn, en el oeste de Kiev, un bombardeo destruyó un edificio de 16 plantas, donde “los cuerpos de dos personas fueron recuperados y 27 personas fueron rescatadas”, indicaron las autoridades en un comunicado en Facebook. @ArisMessinis
El Gobierno de Rusia afirmó que ya controla toda la provincia de Jersón, en el sur de Ucrania, en el vigésimo día de la invasión al país, mientras las partes reanudaban las negociaciones y las fuerzas invasoras mantienen los ataques contra la capital, Kiev, que decretó un toque de queda de 36 horas.
El alcalde de Kiev, Vitali Klichkó, anunció un toque de queda de 36 horas en la capital a partir de este martes por la noche debido a la situación “difícil y peligrosa” que vive la ciudad.
En un comunicado, el funcionario explicó que la circulación en la ciudad estará prohibida desde las 20 locales (las 15 en la Argentina) de este martes hasta las 7 (las 2) del jueves próximo.
En tanto, el portavoz de Defensa ruso, general mayor Ígor Konashenkov, afirmó que “las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia se hicieron con el control de todo el territorio de la provincia de Jersón”.
Por otra parte, autoridades locales anunciaron que el aeropuerto de la ciudad de Dnipro, al este de Ucrania, sufrió una “destrucción masiva” tras dos bombardeos rusos este martes por la madrugada.
“Por la noche, el enemigo atacó el aeropuerto de Dnipro. Dos ataques. La pista de despegue y de aterrizaje está destruida. La terminal resultó muy dañada. Destrucciones masivas”, escribió Valentin Reznitshenko, gobernador de la región, en la red Telegram, según reprodujo la agencia de noticias AFP.
Además, al menos dos personas murieron durante la mañana del martes en ataques contra zonas residenciales de Kiev, parcialmente rodeadas por las tropas rusas.
Los habitantes de la capital ucraniana se despertaron este martes con tres profundas explosiones, y los servicios de emergencia indicaron posteriormente que correspondían a ataques contra zonas residenciales en distintos distritos.
En Sviatoshyn, en el oeste de Kiev, un bombardeo golpeó un edificio de 16 plantas, donde “los cuerpos de dos personas fueron recuperados y 27 personas fueron rescatadas”, indicaron las autoridades en un comunicado en Facebook.

También hubo un ataque sin víctimas contra una casa en Osokorky (sureste) y fuego de artillería que provocó un incendio luego extinguido en un edificio de viviendas en Podilsk (noroeste), donde una persona fue hospitalizada, añadieron.
En ese lugar, cubierto de cristales y escombros, una columna de humo salía del enorme agujero dejado por el impacto mientras los vecinos echaban por las ventanas rotas las ruinas de sus casas, indicó un periodista de AFP.
El ataque se produjo antes de la prevista reanudación de las conversaciones iniciadas por videoconferencia entre ambos bandos en la víspera y que, según el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, fueron “bastante bien”.
Uno de sus principales asesores, Oleksiy Arestovich, dijo que espera que la guerra concluya en mayo, como tarde, mediante un acuerdo de paz. “A principios de mayo podría lograrse un acuerdo de paz. Quizá mucho antes, ya veremos”, dijo Arestovich, citado por la agencia de noticias Europa Press.
En tanto, las tropas rusas extendieron el control a la totalidad de la provincia de Jersón, en el sur del país, de unos 280 000 habitantes.
In #Kyiv, Sviatoshynsky district, on March 15, 2022. #Ukraine #Ukraine️RussiaWar pic.twitter.com/ZbdSAlj2KY
— Aris Messinis (@ArisMessinis) March 15, 2022
Al hacer un balance preliminar de la invasión militar, el portavoz de Defensa ruso dijo que “se han destruido 156 aparatos aéreos no tripulados, 1306 carros de combate y blindados, 127 lanzacohetes múltiples, 471 sistemas de artillería y morteros, así como 1054 vehículos militares”, reportó la agencia de noticias Sputnik.
Los militares rusos derribaron este lunes 16 blancos aéreos sobre Ucrania, a saber, 13 drones, incluyendo seis del modelo turco Bayraktar TB2, un avión de combate Su-24, un Su-25 y un helicóptero Mi-8.
Además, fueron destruidos con ataques aéreos 136 objetivos militares, entre ellos siete puestos de mando y centros de comunicaciones, cuatros sistemas de misiles antiaéreos, cuatro depósitos de municiones, varios radares y 72 aglomeraciones de equipamiento bélico, consignó Sputnik.
La ONU registró al menos 596 muertes de civiles desde el 24 de febrero, aunque cree que la cifra real es mucho mayor. Millones más han huido de sus hogares, con más de 2,8 millones cruzando a Polonia y otros países vecinos en lo que la ONU ha llamado la mayor crisis de refugiados de Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
La fábrica de armas Artem en el centro de Kiev también fue atacada, con imágenes tomadas por un residente local que muestran humo saliendo del techo. Afuera de los quioscos cercanos, comerciantes y ayudantes barrían vidrios y otros escombros del impacto de las explosiones.
Rusia dijo el lunes que planeaba atacar fábricas de armas ucranianas en represalia por lo que calificó como un ataque ucraniano en la ciudad de Donetsk, controlada por los separatistas, e instó a los trabajadores y residentes locales a mantenerse alejados. Ucrania negó haber lanzado un ataque.
Kiev se ha librado de lo peor de los combates desde que Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero, pero el ejército ruso se está acercando lentamente a la ciudad y los bombardeos se han intensificado.
“Lo que está sucediendo ahora mismo en Járkov, en Mariúpol y otras ciudades, era comprensible que tarde o temprano sucediera en Kiev”, dijo el residente local Igor Krupa.
Con información de las agencias AFP, Reuters y Télam