Los alcaldes Eduardo Paes, de Río de Janeiro, y Axel Grael, de Niteroi, anunciaron este lunes, un paquete de medidas restrictivas tomadas en forma conjunta para contener el avance de la pandemia del nuevo coronavirus en esas dos ciudades.
Las medidas entrarán en vigor el 26 de marzo y durarán hasta el 4 de abril, y, entre ellas, se mantiene la prohibición de circular por la vía pública desde las 23 hasta las 5, informó el diario Extra.
“El período no debe entenderse como un día festivo, sino como medidas para proteger la vida y el aislamiento social, respetando las directrices municipales”, advirtieron las autoridades durante la presentación de las restricciones, en el Teatro Popular Oscar Niemeyer, en Niteroi.
El sistema hospitalario de Río de Janeiro está al borde del colapso desde hace varios días debido al brusco aumento de casos graves de covid-19, por lo que las autoridades tomaron la drástica e inédita decisión de prohibir a sus habitantes acudir a las playas el fin de semana.
Según datos de la Secretaría Municipal de Salud, el porcentaje de ocupación de las unidades de cuidados intensivos (UCI) de los hospitales es de 96%.
Brasil, el segundo país más golpeado por la pandemia después de EE. UU., superó este lunes la cifra de 295 000 muertos y 12 millones infectados por covid-19. En las últimas 24 horas se registraron 1.570 muertes, totalizando 295.685 fallecimientos. Desde las 20 del domingo, se reportaron 55177 casos, elevando el número total de personas que se infectaron con el coronavirus a 12 051 619.
Por ello, durante 10 días, en Río de Janeiro y Niteroi –conectadas por un puente que atraviesa la bahía de Guanabara– estará prohibida la presencia de guarderías, establecimientos de educación infantil, primaria, secundaria y superior, centros de enseñanza de deportes, música, arte y cultura, ferias, exposiciones, congresos y seminarios.
No podrán abrir museos, galerías, bibliotecas, cines, teatros ni salas de conciertos ni salones de peluquería, barberías, institutos de estética y belleza, clubes sociales, deportivos y servicios de ocio, ni parques de atracciones y circos.
Siguen vigentes la prohibición de eventos y fiestas en áreas públicas y privadas, incluidos los círculos de samba, discotecas, clubes de baile, salones de baile y casas de fiesta.
También está prohibida la permanencia de individuos en las arenas de las playas, en cualquier momento; el ingreso de ómnibus y otros vehículos chárter en el municipio, como los buses turísticos, excepto aquellos que brinden servicios regulares para empleados de la empresa o para hoteles, cuyos pasajeros acrediten, en este caso, reserva de alojamiento.
No se pueden usar los carriles de las avenidas Delfim Moreira, Vieira Souto y Atlántica y ambos sentidos de los carriles del Aterro do Flamengo como áreas de ocio.
Sin embargo, podrán funcionar los servicios esenciales, como transporte de pasajeros, entrega a domicilio, telecomunicaciones y call center, fúnebres y lavandería.
También las sucursales bancarias y las loterías; sin embargo, la Federación Brasileña de Bancos recomienda que los clientes prefieran realizar sus actividades bancarias a través del teléfono celular y la aplicación de Internet, por teléfono y cajeros automáticos, en las salas de autoservicio de las sucursales y cajeros automáticos las 24 horas.
Podrán prestarse los servicios sanitarios, farmacias y comercio de equipos médicos y complementarios y óptica, del mismo modo que la asistencia veterinaria, servicios y comercio de suministros para animales, y los de materiales de construcción, ferretería y similares.
¿Qué pasa con los centros comerciales, galerías y centros comerciales? Solo podrán funcionar las actividades que se consideren imprescindibles, como farmacias y establecimientos de alimentación, estrictamente con sistema de reparto.
Las cafeterías, bares y restaurantes solo podrán funcionar con sistemas de entrega a domicilio. Se prohíbe el consumo en el lugar y la permanencia del público dentro del establecimiento.
Los hoteles y alojamientos podrán funcionar con el servicio de comida solo para los huéspedes.
Las iglesias no se cerrarán, pero habrá limitaciones de capacidad tanto en Río como en Niteroi.
A pesar de la desesperante situación por la que atraviesa todo el gigante sudamericano, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvió a sorprender ayer al afirmar que el país “está bien” y que incluso constituye un “ejemplo” contra el coronavirus.
CGP