Brasil: un juez anula las condenas por corrupción contra Lula

El juez del Tribunal Supremo de Brasil Edson Fachin anuló este lunes cuatro procesos en los que el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, líder del partido de los Trabajadores, había sido condenado por corrupción.

Fachin ordenó comenzar nuevamente la investigación en otros fueros debido a la supuesta parcialidad de la Fiscalía y el exjuez y exministro Sérgio Moro.

El magistrado tomó esta decisión al admitir un habeas corpus impuesto por la defensa del expresidente Lula en el marco de las causas impulsadas por la hoy cuestionada Operación Lava Jato, informó la Agencia Télam.

La decisión monocrática de Fachin, un juez conocido por haber estado alineado a las denuncias y casos impulsados por la Operación Lava Jato, se produjo luego del escándalo generado por la filtración de mensajes que desnudaron lo que Lula y el PT siempre denunciaron: el trabajo conjunto y secreto de los fiscales y el entonces juez Moro para condenar al exmandatario antes de que pudiera competir en las últimas elecciones presidenciales.

Lula pasó 580 días preso en la ciudad de Curitiba, capital del estado de Paraná, y tras ser detenido en medio de un operativo que fue transmitido en el mundo entero, tuvo que bajar definitivamente su candidatura.

El exjuez Moro más tarde se convirtió en el primer ministro de Justicia del presidente que triunfó en esas elecciones, el actual mandatario Jair Bolsonaro.

En una decisión inesperada, Fachin resolvió que la sala que juzgó a Lula no era competente.

El fallo responde a un recurso presentado por el líder del PT. En dos de los casos ahora anulados, la pena fue ratificada en segunda instancia, por lo que Lula perdió sus derechos políticos y por eso fue excluido de la carrera electoral que aupó a Bolsonaro a la Presidencia hace más de dos años, informó el diario español El País.

Lula, de 75 años, no descarta presentarse a los próximos comicios, previstos para 2022.

Los casos anulados por Fachin son los concernientes a un departamento triple ubicado en Guarujá, una finca ubicada en Atibaia (por los cuales fue condenado a varios años de prisión) y otros dos procesos relacionados con el Instituto Lula.

El expresidente fue condenado por corrupción y lavado de dinero, y por recibir prebendas a cambio de favores políticos. Lula salió de la cárcel, gracias a un fallo del Tribunal Supremo, en noviembre de 2019.

Fachin sostiene que aquellos casos no debieron juzgarse en Curitiba, en el juzgado que dirigía Sergio Moro, sino en el Distrito Federal, adonde los deriva en su inesperado fallo de este lunes.

Curitiba es la ciudad de Paraná donde más fuerza tomó la investigación de la [operación] Lava Jato y donde Lula estuvo preso.

La decisión de Fachin sacude el tablero político brasileño en un momento en el que la pandemia está totalmente fuera de control, con los hospitales desbordado con enfermos de coronavirus en varios estados y el resto del país al límite.

Las críticas contra Bolsonaro, por su nefasta gestión de la epidemia y su incapacidad de garantizar la cantidad necesaria de vacunas, se acumulan.

La decisión es una victoria para Lula que presentó un habeas corpus ante el Supremo hace más de dos años, cuando Moro anunció que aceptaba la invitación de Bolsonaro para ser ministro de Justicia.

El exjuez salió del Gobierno con un portazo acusando al mandatario de injerencia para proteger a sus hijos ante investigaciones judiciales.

El sistema judicial brasileño contempla que los jueces del Supremo tomen decisiones unipersonales.

CGP

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