Por la recesión, que provocó una fuerte caída de salarios y, por ende, del poder adquisitivo, el consumo se desplomó un 14 % en abril, según la medición de la consultora Scentia.
El relevamiento “Consumo y contexto económico”, realizado por Ecolatina en marzo de este año, destaca que 9 de cada 10 consumidores cambiaron su forma de comprar en supermercados: dejaron de comprar productos que antes consumían a diario y ahora buscan más promociones.
Las empresas implementaron mayores descuentos para fomentar el consumo. Según el informe, el 95 % de los encuestados aprovecha promociones en sus compras, especialmente el 2×1, ya que es la más efectiva para abaratar las compras.
“7 de cada 10 encuestados declararon que el 2×1 es la promoción que más aprovechan, mientras que otras, como los descuentos con billeteras virtuales o tarjetas bancarias, se utilizan con menos frecuencia”, sostiene la consultora.
Además, al menos 6 de cada 10 consumidores optaron por segundas marcas, especialmente las marcas propias de las cadenas.
Los productos que más migraron de primeras a segundas marcas fueron los de almacén, limpieza, higiene y cuidado personal. El segmento de lácteos también se vio afectado, aunque en menor medida, ya que muchos consumidores han dejado de comprar esta categoría directamente.
En términos de edad, los jóvenes son los más propensos a probar productos de cadenas. De hecho, el 52 % de aquellos que decidieron probar estos productos encuentran que son tan buenos, o incluso mejores, que los que usaban anteriormente.
En cuanto a la vida cotidiana de los consumidores, casi la mitad declaró que tuvo que recortar servicios en su hogar, principalmente el servicio de TV por cable y de streaming.
Además, 2 de cada 10 mencionaron haber abandonado la medicina prepaga.
Con información de NA