Caá Catí volverá a vivir este 1 de noviembre la tradición de Ángeles Somos, con la instalación de un stand frente a la Municipalidad y una posta de chamameceros.
“Es una celebración arraigada como costumbre, que nunca se perdió en el pueblo. Se transmite de generación en generación y se vive cada vez con más intensidad”, comentó el subsecretario de Cultura municipal, Matías Geneiro.
El 1 de noviembre, la Iglesia católica celebra el Día de Todos los Santos y el 2, el de los Fieles Difuntos. En la zona guaranítico-jesuita de Corrientes, se arraigó la tradición de Ángeles Somos, que consiste en el desfile de niños vestidos como angelitos, que “llevan el mensaje de paz, de confortación, de consuelo” a las familias que perdieron a un niño.
El recorrido dura hasta el mediodía. Los niños recitan pregones y, en algunos casos, entregan a los que visitan decenarios del rosario, en tanto reciben de ofrenda una colación: comidas tradicionales, como chipá y variedad de golosinas o frutas.
Por la noche, músicos locales, de la zona y de otras provincias se suman al festejo y llevan serenatas como ofrenda, mientras las familias salen a sus veredas a esperarlos con comidas típicas y bebidas.
Este año, la Municipalidad instalará un stand con suvenires y presentes para los niños, y, por la noche, servirá un refrigerio en el Paseo de los Músicos, se informó.
CGP
Foto: Municipalidad de Caá Catí